WASHINGTON (OSV News) -- El presidente Donald Trump publicó una imagen que parecía haber sido creada por inteligencia artificial (IA) en la que se representaba a sí mismo como Papa pocos días después de hacer un comentario a los periodistas en el que decía que le gustaría convertirse en el próximo pontífice.

La imagen provocó la condena de algunos líderes religiosos y comentaristas, mientras que otros la defendieron como una broma.

El 2 de mayo, a última hora de la tarde, Trump publicó en su sitio web Truth Social una imagen de sí mismo con lo que parecían ser las vestiduras tradicionales del Papa, sin pie de foto. Pero la imagen desató la polémica cuando fue compartida por la cuenta oficial de la Casa Blanca de X (antes conocido como Twitter).

"Recientemente dijo a Time que su promesa de poner fin rápidamente a la guerra de Ucrania en el 'primer día' de su presidencia 'fue dicho en broma", dijo Schmuhl el 3 de mayo. "Ahora está haciendo circular una imagen suya como el Papa. ¿Realmente pretende ser gracioso? Millones de católicos en Estados Unidos y en el extranjero ciertamente no pensarán así".

El obispo Thomas J. Paprocki de Springfield, Illinois, dijo que Trump debería disculparse por la imagen, que calificó de "profundamente ofensiva para los católicos, especialmente durante este tiempo sagrado en el que todavía estamos de luto por la muerte del Papa Francisco y rezando por la guía del Espíritu Santo para la elección de nuestro nuevo Papa".

"Él debe una disculpa", dijo el obispo Paprocki, argumentando: "No se engañen: de Dios nadie se burla' (Gálatas 6,7). El Papa es el Vicario de Cristo. Al publicar una foto de sí mismo haciéndose pasar por el Papa, el presidente Trump se burla de Dios, de la Iglesia católica y del Papado".

Joshua Mercer, vicepresidente de CatholicVote, una organización de defensa política de tendencia derechista que respaldó la candidatura presidencial de Trump, argumentó en un comunicado: "El meme jocoso de Trump en el que se representa a sí mismo como el Papa tenía obviamente una intención humorística".

"No hay necesidad de imaginar que él cree que podría ser Papa, o que su intención era burlarse del papado", dijo Mercer. "Memes que representan a personajes famosos como el nuevo Papa han estado circulando a modo de broma en las redes sociales por todas partes durante la semana pasada".

Pero la Conferencia Católica del Estado de Nueva York escribió en X: "No hay nada ingenioso o divertido en esta imagen, señor presidente".

"Acabamos de enterrar a nuestro amado Papa Francisco y los cardenales están a punto de entrar en un cónclave solemne para elegir a un nuevo sucesor de San Pedro", decía el post de la conferencia. "No se burlen de nosotros".

Cuando se le pidió un comentario, Dennis Poust, director ejecutivo de esa organización, dijo: "Es difícil decir cuál era la intención del presidente al publicar la imagen, pero una persona razonable concluiría que probablemente sería ofensiva para los católicos, especialmente porque todavía estamos de luto por el Papa Francisco".

"No creo que el presidente Trump sea anticatólico, pero el post fue sin duda chocante y ofensivo para muchos y espero que lo retire y ponga fin a esta peculiar línea de troleo o lo que sea que esté haciendo", dijo Poust. "El hecho de que la cuenta oficial X de la Casa Blanca lo compartiera lo empeoró todo en mi opinión, ya que dio al post el peso de la Oficina del Presidente, en lugar de ser simplemente una broma grosera de Donald Trump, el individuo".

La publicación se produjo unos días después de que un periodista preguntara a Trump quién le gustaría que fuera el próximo pontífice católico, y pareció bromear al responder: "Me gustaría ser Papa. Esa sería mi opción número 1".

Pero luego Trump dijo que no tenía ninguna preferencia, y añadió: "Debo decir que tenemos un cardenal que casualmente es de un lugar llamado Nueva York que es muy bueno, así que veremos qué pasa", en referencia al cardenal Timothy M. Dolan de Nueva York, a quien Trump nombró para una comisión de libertad religiosa esa misma semana.

En un vídeo publicado en X el 4 de mayo desde The Good Newsroom, el medio digital de noticias de la archidiócesis de Nueva York, el cardenal Dolan dijo: "Espero que no haya tenido nada que ver con eso", en respuesta a una pregunta sobre el post de Trump.

A la pregunta de si se sintió ofendido por el post, el cardenal Dolan respondió: "No estuvo bien".

En su declaración, Mercer argumentó: "Los críticos más ruidosos de hoy estuvieron vergonzosamente callados durante cuatro años mientras el presidente (Joe) Biden, él mismo católico, era un escándalo manifiesto para la Iglesia".

"Dicho esto, este es un tiempo solemne de oración y discernimiento para toda la Iglesia Católica que no debe ser disminuido", dijo Mercer. "Todo el mundo comprende que lo que ocurra en Roma en los próximos días tendrá una importancia duradera para todo el mundo. La Iglesia ha sobrevivido a cosas mucho peores en los últimos dos milenios".

El vicepresidente JD Vance defendió a Trump en X, argumentando: "Como regla general, me parece bien que la gente cuente chistes y no me parece bien que la gente empiece guerras estúpidas que matan a miles de mis compatriotas", escribió Vance en respuesta a un post de Bill Kristol, editor en jefe de The Bulwark, preguntando si Vance estaba "de acuerdo con esta falta de respeto y burla al Santo Padre".

Pero el obispo Daniel E. Flores de Brownsville, Texas, escribió en X en una aparente referencia a la controversia: "Justo cuando pensabas que era seguro volver a revisar tu timeline de vez en cuando".

"Lean un buen libro, amigos, vayan a visitar a un pariente anciano, cualquier cosa para evitar que los algoritmos les coman el alma", dijo.

Schmuhl añadió que el post era más sacrílego -- y ridículo -- que su comercialización de la llamada ‘Biblia de Trump’".

Preguntado por el post de Trump, Robert P. George, profesor McCormick de jurisprudencia y director del Programa James Madison en Ideales e Instituciones Americanas en la Universidad de Princeton, también mencionó el esfuerzo de Trump para vender Biblias con su marca, diciendo a OSV News que él es "ante todo y sobre todo un hombre de negocios", y ha "encontrado un ángulo para tratar de vender más Biblias Trump".

Trump asistió al funeral del difunto Papa Francisco el 26 de abril.