(OSV News) -- Católicos que huyen de los incendios forestales que arrasan Los Ángeles han estado rezando por la intercesión de Nuestra Señora de Champion, quien una vez salvó un santuario rural en Wisconsin de un devastador incendio.

Mientras tanto, en Wisconsin, católicos vinculados a ese santuario rezan para que María conceda ahora otro milagro a los angelinos.

El padre Tony Stephens, miembro de los Padres de la Misericordia y rector del Santuario Nacional de Nuestra Señora de Champion cerca de Green Bay, celebró una misa el 10 de enero por las intenciones relacionadas con los incendios de Los Ángeles. Oró por el fin de los incendios y por lluvia, por la seguridad de las personas, por los bomberos y la policía, por la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, y el gobernador de California, Gavin Newsom, y "para que la gente deje de señalar con el dedo en busca de culpables en este momento", expresó a OSV News.

Nuestra Señora de Champion honra la aparición de María en 1859 a Adele Brise, una inmigrante belga analfabeta en los Bosques del Norte de Wisconsin. En 1871, Brise lideró oraciones de protección contra el Gran Incendio de Peshtigo, el incendio más devastador en la historia de Estados Unidos hasta la fecha, que cobró la vida de alrededor de 2.400 personas y quemó 1,2 millones de acres. A medida que el fuego se acercaba al pueblo de Champion, las familias agricultoras del área, algunas con su ganado, buscaron refugio con Brise y sus compañeras en una capilla construida para honrar las apariciones. Juntas procesionaron en oración alrededor del santuario mientras el fuego quemaba la cerca perimetral del terreno, pero no cruzó los límites.

Al día siguiente llovió. Quienes buscaron refugio se salvaron, algo que muchos atribuyeron a la intercesión de María.

Además de rezar a Nuestra Señora de Champion, el padre Stephens señaló que también está pidiendo la intercesión de Brise, cuya causa de canonización está siendo evaluada, así como la intercesión de San Swithin, un santo inglés del siglo IX y exobispo de Winchester conocido por proteger contra la sequía.

El 9 de julio, el santuario publicó una versión de su oración a Nuestra Señora de Champion, que incluía un pedido por el fin de los incendios en Los Ángeles. En el programa radial en vivo Family Rosary Across America de Relevant Radio el 10 de enero, su líder, el padre Rocky Hoffman, también invocó la intercesión de María para que cesen los incendios forestales bajo ese título específico.

Varios incendios forestales han estado arrasando Los Ángeles desde el 7 de enero, propagados por fuertes vientos y afectando múltiples áreas. Los incendios de Palisades, Eaton y Hurst han destruido aproximadamente 60 millas cuadradas. Al menos 24 personas han muerto y muchas más están desaparecidas. Se han ordenado evacuaciones de más de 92.000 residentes del condado de Los Ángeles.

Históricamente, muchos santos han sido invocados para interceder contra el fuego. San Florián, un oficial romano del siglo III, es el santo patrón de los bomberos, ya que una leyenda narra que salvó un pueblo del fuego usando solo un balde de agua. Santa Catalina de Siena también es considerada protectora contra incendios, ya que fue envuelta por un fuego de cocina mientras rezaba profundamente, pero su hermana la rescató ilesa. Santa Bárbara también es invocada para proteger contra la muerte por fuego o electricidad.

Asimismo, existen patronos históricos en varias áreas amenazadas por los incendios de Los Ángeles, originalmente nombradas por exploradores y colonos españoles en honor a santos católicos, como la ciudad de Santa Mónica, que ha emitido órdenes de evacuación obligatoria para algunos vecindarios debido al avance del incendio de Palisades. La madre de María, Santa Ana, probablemente da nombre a los peligrosos vientos de Santa Ana que están dificultando la contención de los incendios.

Aunque puede parecer natural que los residentes de la Ciudad de los Ángeles invoquen a sus ángeles guardianes para obtener toda la ayuda necesaria contra los incendios, la Arquidiócesis de Los Ángeles tiene otra patrona, aunque más desconocida: Santa Vibiana, cuyas reliquias se encuentran en la Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles.

Santa Vibiana, virgen y mártir del siglo III, fue enterrada en las catacumbas romanas de la Vía Apia. Su tumba fue redescubierta en 1853. Según el sitio web de la catedral, el Papa Pío IX entregó las reliquias al obispo Thaddeus Amat, quien había sido nombrado recientemente para la Diócesis de Monterrey, California -- que en ese entonces incluía Los Ángeles -- con la orden de construir una catedral en su honor.

La catedral se completó en 1876 y fue nombrada Santa Vibiana en su honor, pero después de sufrir daños significativos durante el terremoto de Northridge en 1994, la arquidiócesis decidió construir una nueva catedral, Nuestra Señora de los Ángeles, y las reliquias de Santa Vibiana fueron trasladadas a su cripta. (La catedral original, que fue desacralizada, eventualmente fue restaurada y abierta como un recinto para eventos).

Las reliquias de Santa Vibiana sobrevivieron, también, a un incendio en una iglesia de Santa Bárbara, donde estuvieron resguardadas mientras se recaudaban fondos para la construcción de la catedral.

Aunque la devoción popular hacia la santa ha disminuido, algunos católicos han hecho esfuerzos por revivirla, especialmente a través de una organización con sede en Los Ángeles llamada Gaudent Angeli. El 11 de enero, sus líderes enviaron por correo electrónico una súplica a Santa Vibiana con una oración que concluía con: "¡Sálvanos a nosotros y a la ciudad que el Divino Esposo te confió!"

Paul de Partee, un converso al catolicismo cofundó Gaudent Angeli junto con otras dos personas durante la pandemia de COVID-19. Él está animando a los católicos a invocar a Santa Vibiana, aunque la considera una santa "modesta" que no busca atención.

Sin embargo, destacó que sus reliquias fueron descubiertas en el aniversario de la primera aparición de Nuestra Señora de Guadalupe, otra santa muy querida por muchos angelinos.

"Santa Vibiana ha estado presente en Los Ángeles desde su fundación, al menos como diócesis", afirmó. "Deberíamos estar rezando por su intercesión ante el fuego porque ella está íntimamente conectada con Los Ángeles y se preocupa no solo por los católicos, sino por todas las personas que viven allí, y vive para interceder en todo momento".

El padre Stephens agregó que los católicos deberían tomar en serio la posibilidad de un milagro.

"Estoy absolutamente rezando por eso", afirmó, y añadió que hasta que los incendios sean extinguidos, "ciertamente lo mantendremos en nuestras peticiones".